Las mujeres, sólo por el hecho de ser mujeres, viven diversas formas de violencia de parte de sus parejas o de su entorno que van desde el control hasta la agresión física. Esto se justifica porque en muchas culturas, incluida la chilena, todavía se cree que los hombres tienen derecho a controlar la libertad y la vida de las mujeres.
Ten presente que los celos, gritos, amenazas, manipulación, empujones, control y aislamientos no son conductas normales en una relación de pareja, ya que son señales de violencia. Si eres víctima de algo así, recuerda que no estás sola.
Existen diferentes tipos de violencia:
- Violencia física: son todas las formas de agresión a las mujeres, empujones y zamarreos, tirones de pelo, pellizcos, apretones, golpes de puño y patadas hasta los golpes con objetos. La forma más fuerte de agresión física contra una mujer es el femicidio.
- Violencia psicológica: se intenta controlar a una mujer a través de amenazas y presión emocional con el objetivo de causar inseguridad y lograr, mediante la manipulación, el poder sobre sus decisiones.
- Violencia sexual: cuando una mujer es obligada por la fuerza física o amenazas psicológicas, a tener relaciones sexuales o a realizar actos sexuales que le resultan humillantes o degradantes.
- Violencia económica: se intenta controlar a la mujer mediante la entrega del dinero necesario para su mantención y la de sus hijas, hijos y de otras personas que integren el grupo familiar. Otra forma de violencia económica es la que se manifiesta cuando la pareja se apropia del dinero de la mujer y controla cada uno de los gastos realizados.
- Violencia de género en contexto digital: vulneración de la dignidad y la libertad de la vida privada de las personas, mediante el uso de tecnologías de la información y comunicación como Internet, redes sociales y telefonía móvil.
- Violencia gineco-obstétrica: se refiere al maltrato o agresión psicológica, física o sexual, omisión, discriminación o negación injustificada de atención en el marco de la salud sexual y reproductiva. También, se considera violencia a las burlas e insultos, negación o abuso de medicación u ocultamiento de información, maniobra de Kristeller y la episiotomía sin justificación médica, ni consentimiento de la gestante. El proyecto, conocido como «Ley Adriana», establece derechos en la gestación, preparto, parto, post parto, aborto, salud sexual y reproductiva, y sanciona la violencia gineco-obstétrica.
- Acoso sexual: Cuando a una mujer se le exigen favores sexuales a cambio de su permanencia en el trabajo o su condiciona su ascenso o cualquier mejoría laboral. También ocurre en los lugares de estudio, cuando se condicionan notas o pasar de curso a cambio de acceder a las peticiones de un profesor o director.
- Hostigamiento y/o agresión en los espacios públicos: Casi todas las mujeres, de distintas edades y condición social, han sido molestadas y/o agredidas en la calle, en el transporte público e incluso en su trabajo. Con el pretexto de un «piropo» o que la mujer sería atractiva se les dicen groserías, o se justifican «agarrones» y manoseos.
Si eres testigo o víctima de violencia, llama a cualquiera de los siguientes números:
- Fono Familia de Carabineros: 149.
- Policía de Investigaciones: 134.
- Fono de orientación y ayuda por violencia contra las mujeres: 1455.
- Fono Denuncia Segura: 600 400 0101.
- WhatsApp Mujer +569 9700 7000.